Viernes 09 de junio de 2023
Entre el 15 y el 22 de mayo, se realizaron las actividades de inmersión que corresponde a la etapa final del programa internacional Innovation Experience 360° que, enfocado mayoritariamente en emprendedores/as y empresarias/os, busca contribuir a generar oportunidades de negocio globales, fomentando la colaboración entre compañías que están desarrollando las tecnologías más disruptivas a nivel mundial.
Una de las participantes de este programa fue Andrea Catalán Lobos, Directora Ejecutiva de la Oficina de Transferencia y Licenciamiento de la Vicerrectoría de Investigación y Desarrollo (VRID) de la Universidad de Concepción, UdeC, quien explica que la entidad organizadora del programa “promueve el conocimiento del ecosistema de innovación y emprendimiento en Israel y comenzó en octubre, con una serie de talleres virtuales que se desarrollaron hasta febrero, los domingo de 11 a 13 horas, en los que participábamos aproximadamente cien personas y fueron dictados por relatores de distintas instituciones de Israel, abordando muchos temas diversos, como tendencias tecnológicas hasta procesos de innovación y de emprendimiento, procesos de protección industrial, de venture capital y también aspectos que tenían que ver con la cultura israelí”.
Esta parte del programa culmina con una certificación que, a su vez, habilita a los/as participantes a acceder a la gira presencial que tuvo lugar en diversas instalaciones de Tel Aviv y Jerusalén, divididos en tres grupos distintos de acuerdo a su perfil. En el caso de Andrea, de las 34 personas que componían su grupo, tres eran chilenas y, de ellas, ella era la única que provenía del ámbito universitario.
“Es muy interesante”, detalla la directiva, “saber cómo, en Israel, las empresas hacen gestión de la innovación, cómo se relacionan y colaboran en el ecosistema y cómo ese ecosistema funciona con actores como startups, venture capitals y generadores de conocimiento”.
Desde el punto de vista cultural, Andrea explica que el reconocimiento internacional de que gozan los israelíes en temas de innovación se debe, en gran medida, “a la alineación estratégica, que es un concepto que se usa para una empresa que hace gestión de innovación, pero acá está aplicado a todo un país: todos, de alguna forma, responden y priorizan una ruta, con un objetivo, y esto da frutos”.
Además, agrega, “hay un elemento de formación y de educación de los jóvenes que están más expuestos a la tecnología de punta y un buen ejemplo de ellos es la experiencia que obtienen en el servicio militar, donde son destinados, por ejemplo, a oficinas del Departamento de Defensa o del Ejército y ahí pueden familiarizarse con tecnologías que, si bien, han sido desarrolladas para la defensa, tienen la posibilidad de ser utilizadas en aplicaciones civiles”.
En la instancia, se dio naturalmente, explica Andrea, varias oportunidades de networking entre los participantes para analizar probables alianzas de colaboración. “Esto es muy positivo, porque se puede generar, por ejemplo, una red con otras universidades y con empresas que están en distintos mercados y que pueden ser futuros licenciatarios de alguna tecnología que se esté desarrollando en la UdeC”, ejemplificó.
Otro punto de esta gira que destaca la directiva es la posibilidad de “darnos cuenta del enorme ecosistema de startups que se ha creado en Israel, impulsado, en gran medida, por un flujo de capital mucho mayor que el que tenemos, por ejemplo, acá en Chile, porque los inversionistas también tienen una cultura distinta respecto al riesgo”.
El programa de visitas incluyó el Weizmann Institute of Science y el Peres Center for Peace & Innovation, además de oficinas de inversionistas, empresas y una gran planta desaladora.